A lo largo del curso hemos visto ejemplos de edificaciones para
clases obreras así como polígonos metropolitanos como la Casa Bloc y el
polígono de Montbau. Si bien Santiago no sufrió grandes ampliaciones, cabe
destacar las Casa de Ramírez, como una serie de edificaciones para obreros
levantadas en las décadas de los 40-50 y que hoy en día se encuentran
catalogadas y protegidas por ser consideradas como " un notable ejemplo de
la arquitectura de la época".
Construidas en
terrenos agrícolas a las afueras de Santiago de Compostela, eran una serie de
viviendas de baja calidad, un total de 212 agrupadas en 224 edificaciones de
PB+4.
Desde un punto de
vista arquitectónico son edificaciones de planta cuadrada, unidas por medio de
las cajas de escaleras a las cuales se accede desde la calle por medio de un
pequeño patio privado. El conjunto forma un tridente, dejando un gran espacio
para una zona de parque (único elemento que fue variando notablemente a lo
largo del tiempo).
De las Casas Ramírez
cabe destacar el tratamiento de la planta baja. Todas las edificaciones se retrasan
formando soportales, muy típicos del casco antiguo.
Esta manera de
dialogar con la calle resulta bastante peculiar en las edificaciones modernas
de Santiago, y no por ello desacertada. Si bien en un principio fueron párquines
para coches, en la actualidad albergan
un sinfín de pequeñas tiendas y comercios que gracias a esta solución permiten
al peatón disfrutar de sus escaparates mientras que una incesante lluvia moja
las calles empedradas de la ciudad.
Hoy en día ya
perdieron su situación marginal de las
afueras y se encuentran en pleno centro del ensanche, y no obstante mantienen
su identidad claramente diferenciada del resto del collage de edificaciones de
baja calidad arquitectónica que forman el centro de la ciudad moderna.
Aquí podría acabar
esta publicación, que, porque no decirlo, parecería bastante convencional y
dejaría a uno indiferente. Pero como todo en Santiago, desde sus orígenes,
cidade de meigas e bruxas, el conjunto oculta en sus orígenes una historia de
misterio y dolor.
Escribiendo sobre las Casas de Ramírez me adentré un poco mas en la historia, y ciertamente me sorprendió. Nadie sabía decirme el origen del nombre y finalmente cuando lo descubrí nadie sabía decirme porque una familia con no muchos recursos se permitió comprar y a los pocos años donar todos los terrenos para obra pública. Pues bien la historia se remonta más de cien años atrás....
....Santiago siempre fue ciudad universitaria y en 1870
estudiaba en ella un chico Fernando del que sólo queda su apellido Ramírez.
Estudiante de buenas notas sus padres esperaban mucho de el pues ambos eran licenciados
cosa poco común en la época. Resultó que un año el joven conoció a una chica
(nunca se menciona su nombre) pero debido a esto suspendió gran parte del
curso, temiendo la ira de sus padres el chaval desesperado, se ahorcó de un
árbol que había antes en este terreno.
Los padres visto lo
ocurrido compraron los terrenos y mandaron edificar un crucero en el que se
leía: Aquí yace mi hijo Fernando Ramírez "por favor no recéis por mi"
Esto llama la
atención pero el suicidio estaba muy mal visto en la época. Más adelante la
hermana de Fernando donaría los terrenos para construir estas casas ya que no
podía ver el lugar donde su hermano había muerto. El crucero fue trasladado a
la zona vieja donde hoy en día la gente aun se pregunta porque pone esa
inscripción en su base, esperemos que algún día vuelva a su lugar, y que no
caiga en el olvido esta sorprendente historia.