martes, 26 de junio de 2012

Puerto Madero (BSAS) - Construir para algunos...


La idea de hablar del barrio de Puerto Madero, surge después de la visita al 22@ de Barcelona. Los casos son muy diferentes, pero en ambos, se puede entender la voluntad de la administración de crear un barrio desde cero en unos terrenos en donde la actividad productiva (en ambos casos) ha quedado desfasada y suplantada por otra más “moderna”. La forma, finalidad y uso de los 2 barrios varía mucho, pero sí que se puede ver una misma manera de entender lo urbano y lo estético. El caso de Puerto Madero seguramente es mas exagerado y inmediato que el del 22@, pero esta obsesión creciente en Europa en relación a la seguridad y los espacios “públicos”, llevara al barrio original obrero del Poblenou a deshumanizarse y convertirse en una caricatura de un ideal utópico como ya ha pasado en el Barrio Porteño?

Puerto Madero, no se puede negar, es uno de los barrios más exclusivos de Buenos Aires. Hace ya varios años que viene creciendo a pasos agigantados. Edificios que se alzan “modernos”, restos que se multiplican al lado del río, mucha gente paseando por allí los fines de semana y muchas nuevas (y caras) propiedades con vistas únicas y comodidades varias.



Buenos Aires ha sido siempre una ciudad portuaria. La cercanía al río hacía que fuera éste su principal vía comercial. Pero la ciudad tenía un problema, como las orillas eran poco profundas los barcos no podían acercarse mucho y terminaban a varios kilómetros de distancia descargando mercadería y bajando pasajeros los que debían trasladarse a tierra por medio de lanchas y barcos pequeños. En la década de 1880 era inevitable no pensar en una idea para ampliar el puerto, crear un muelle y construir una estructura que soportase todo el crecimiento económico.

Se presentaron varios proyectos, pero el ganador y que sería el que se llevaría a cabo, fue el presentado por Eduardo Madero (obviamente, de ahí toma el nombre el barrio), un comerciante argentino.


La construcción inicio el 1 de abril de 1887 y termino 10 años después, el 31 de marzo de 1898. A partir de este momento, se comenzaron a edificar los famosos “docks” de Puerto Madero, esas gigantes construcciones de ladrillos que vemos cuando pasamos por allí. La finalidad de estos era ser usados como silos o como depósito para la mercadería que debía ser exportada. Tienen por lo general entre tres y cuatro pisos y un sótano, aunque como todos sabemos hoy en día ya no se usan con esos fines y se han reconvertido en restaurantes de lujo o centros comerciales...

El apogeo del Puerto de Buenos Aires duró solo una década, tanto era el movimiento que había y a causa de las nuevas dimensiones que estaban tomando las embarcaciones en ese entonces, se decidió ampliarlo. Era el año 1911 y hasta 1925 se trabajó en la remodelación que dio vida al Puerto Nuevo, una ampliación hacia el norte con un diseño de dársenas abiertas que continúa operando hasta el día de hoy. Así fue como el antiguo Puerto Madero comenzó a perder su brillo. Los años pasaron y la dejadez se apoderó de él.

El 1989 el Ministerio de Obras y Servicios Públicos de la Nación junto con la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires y la Secretaría General de la Presidencia de la Nación decidieron recuperar todas esas hectáreas de terreno y convertirlo en un barrio más, “habitable”, de la geografía de la Ciudad. Así se formó la Corporación Antiguo Puerto Madero S.A que buscaría la urbanización del lugar, convertirlo en un punto neurálgico de actividades, comercios y recreación.

Hoy en día el barrio cuenta con innumerables locales gastronómicos, cines y comercios. Hasta se está planificando un centro comercial. Espacios verdes (que se cierran en su mayoría por la noche) hay por montones, el Parque Mujeres Argentinas o el Parque Micaela Bastidas, entre otros. Y la actividad inmobiliaria es una de las que más repuntó en la zona.

Este barrio, su forma de funcionar, y su imagen, tienen un precio: Puerto Madero es el emblema de las cámaras de seguridad. En el barrio (más caro de la ciudad) viven apenas 6.628 personas y hay 25 cámaras que filman a toda hora. Otro de los datos más llamativos es que la hay un policía por cada 10 habitantes. En Puerto Madero hay casino pero no hay colegios ni hospitales. Tampoco entran colectivos