El barrio de Sants para mí era apenas un punto de
pasaje en la ciudad. Sants era la estación, el sitio donde llego y donde parto.
Sin embargo, Sants tiene una historia, presentando todavía la fuerte presencia
industrial y una comunidad muy activa,
que lucha por sus derechos, y vive con espirito las tradiciones. Así que para
comparar con una área de Lisboa, me recuerdo del barrio de Alcântara.
Alcântara desde cedo ha sido ocupada, deriva de
la palabra árabe puente, una vez que pasaba ahí una ribera. A pesar de al
inicio tener algunos palacios de veraneo, después del terremoto de 1755,
algunas industrias buscaban en Alcântara su espacio. Destacase la "Companhia de
Fiacção e Tecidos Lisbonense", que tal como acontecía con la fábrica España
Industrial, necesitaba de mucha agua, y de una fuerte capacidad de transporte
de mercancías, posibilitado por la proximidad al rio y por las líneas férreas,
conectando a Lisboa-Cascais y a Lisboa-Sintra.
Con el adviento de la industrialización del siglo
XIX, se empezaran a construir en Alcântara, núcleos urbanos de operarios, pero
con un cariz diferente de Sants. En Lisboa, los barrios fabriles no mesclaban pequeños
oficios o comercio, restrínjanse a los trabajadores de las fábricas, creándose relaciones
y redes de vecinos muy próximas. Las villas eran cerradas por un muro al
exterior, con un patio en su interior, como un espacio semi-publico, pero
urbanizado.
En la actualidad, Alcântara tiene un patrimonio industrial
de valor reconocido, y existe varios proyectos efervescentes. Un de los espacios
comparables con Can Battló, es la LX Factory. La fábrica textil referida va a
ser ahora una isla creativa, ocupada por talleres privados de moda, publicidad,
comunicación, arte, arquitectura, espacio de exposiciones y biblioteca. También
el área más cerca del rio, de naves industriales, ha sido transformada en restaurantes
y bares, teniendo una actividad nocturna muy activa.
Con reminiscencia en la comunidad unida de los núcleos
de operarios, existe un movimiento muy dinámico y revolucionario en el barrio. Hay
un proyecto llamado NovAlcântara, que además de promover más habitaciones,
propone una reorganización del cariz ferroviario y otra de cariz portuario, que
pretende aumentar el espacio de contenedores del puerto. La asociación “Lisboa
é das pessoas” tiene avanzado con varios movimientos populares, para defender la
relación fundamental de Alcântara con el Rio.
Alcântara también es un espacio de pasaje para
muchas personas, por el cruce de las líneas de tren de Cascais y Sintra. Pero
con este texto, digo que hay mucho más.