sábado, 14 de abril de 2012

Montjuïc, un factor de la seguridad nacional

Visitar una ciudad tan repleto de monumentos simbólicos como Barcelona es un recordatorio de los vínculos reales y provocativa entre los sistemas políticos de persuasión y el espacio civil y edificios que generan. Los arquitectos se les enseña a "leer" el código del paisaje, y esta es una ciudad de monumentos de guerra y de los templos emblemáticos cargadas con tentadoras las narrativas nacionales basadas en los hechos, el mito y la propaganda, todo lo cual está inextricablemente entrelazada con las teorías del poder y las ideas sobre "seguridad", incluyendo la seguridad nacional.



El castel de Montjuïc es un elemento tipico que hace referencia a un elemento de seguridad nacional, un lugar permite a un vigilante observar (-opticón) a todos (pan-) los habitantes de Barcelona...






En impulsar aún más la idea del espacio del panóptico, encontramos la pelicula soviética Приведение, которое не возвращается (El fantasma que nunca vuelve), de Abram Room de 1929.
El compuso su película según con la oposición entre los espacios infinitos del cielo y de la celda de los condenados, entre el espacio puqueño individual y el espacio colectivo tan grande, que no es utilizado.