lunes, 18 de junio de 2012

corcovad-tibidab-O

Parece tener una cruz inmensa sobre Rio y bendecir la ciudad como un sacerdote teniendo el ostensorio por encima de sus fieles arrodillados” Stefan Zweig

El Corcovado y el Tibidabo son dos morros que dominan su ciudad, y aunque tengan alturas diferentes (512 metros para el Tibidabo, 704 para el Corcovado), acogen a dos de los parques naturales metropolitanos mas grandes del mundo: 3200ha para el parque de Tijuca, y nada menos que 8000ha para el parque de Collserola!
 Ademas, son dos marcas esenciales de cultura y turismo.
Que seria Río sin el Cristo del Corcovado? Paris sin su Torre Eiffel, o New York sin la estatua de la Liberdad. Símbolo absoluto de la ex-capital, incluso de Brasil, la escultura del artista francés Paul Landowski se ha vuelto desde su inauguración en 1931 en la principal atracción turística de Rio de Janeiro. También es parte de las siete maravillas del mundo moderno. Cada ano, 600 000 visitadores suben al “Jorobado” gracias al pequeño tren rojo para descubrir el sitio turístico mas antiguo de la ciudad. En efecto, el segundo emperador de Brasil, Dom Pedro II inauguró en 1884 el mirador cubierto con un kiosko acristalado apodado “Chapeu do Sol” o sombrero de paja. Hasta la inauguración del Pao de Azucar en 1913, era la única atracción de Rio, y en los anos 1920, la Iglesia que pierde poder lo vió como manera de reafirmar su omnipresencia simbólica. El Cristo, elaborado en el taller del artista cerca de Paris, viene montado por el equipo de Heitor da Silva Costa. Esa estructura de quasi 1200 toneladas esta considerada como una proeza de los ingenieros brasileños. Esta silueta que ondea en el cielo acuerda también que en Brasil, primer país católico del mundo, la religión cristiana se construyó encima de una roca. Con 135 millones de fieles, o sea 15% de los católicos, 1600 sacerdotes y 350 obispos, este país impresiona por sus masas arrodilladas, sus grandes misas televisadas y el vigor de su fe.
En Barcelona, el Templo Expiatorio del Sagrado Corazón creado por el arquitecto modernista Enric Sagnier i Villavecchia es dominado también por una estatua de Jesús Cristo, aunque ella sea menos impresionante. Aquí se quiere enseñar sobretodo la iglesia, que por su diseño y por su nombre acuerda la Basílica del Sacré-Coeur de Montmartre. Su construcción empezó el 28 de diciembre de 1902 y acabó en 1961 pero antes se había construido una pequeña capilla, que aún existe junto al templo, levantada en 1886 para conmemorar la visita de San Juan Bosco a Barcelona, a quien regalaron el terreno de la cumbre. En 1888 con la Exposición Universal, se había abierto la carretera hasta el primer parque de atracción de España (el segundo en Europa), donde se levantaría un pequeño pabellón para hospitar la reine María Cristina durante su visita. Pero el impulso definitivo de la urbanización fue arrancado a partir de 1899 por Salvado Andreu i Grau, un farmacéutico intuitivo y emprendedor que quería dar acceso a la montaña para los Barceloneses con la creación de un tramvia, un funicular y un gran parque de atracción. Antiguamente el nombre era Puig de l'Àliga (cerro del águila). Tibi dabo», que en latín significa «te daré», proviene de unos versículos de la Biblia Vulgata:
    "…et dixit illi haec tibi omnia dabo si cadens adoraveris me"— "Y le dijo: Todo esto te daré si te postras y me adoras" (Mateo 4:9);
    "…et ait ei tibi dabo potestatem hanc universam et gloriam illorum quia mihi tradita sunt et cui volo do illa" — "Y le dijo el diablo: Te daré todo el poder y la gloria de estos reinos, porque a mí me ha sido entregado y se lo doy a quien quiero." (Lucas 4:6).
Estas frases las dice el diablo a Jesús desde una gran altura, mostrándole los reinos de la Tierra. El nombre del Tibidabo parece ser una referencia a esta vista. Es lo que cuenta esta fabula catalana...
                                                                    *cf el puente del Diablo en Martorell